LA ORACIÓN EFICAZ DEL JUSTO PUEDE LOGRAR MUCHO

(SANTIAGO 5:13-18)

“¿Sufre alguno entre vosotros? Que HAGA ORACIÓN. ¿Está alguno alegre? Que CANTE ALABANZAS. ¿Está alguno entre vosotros enfermo? Que LLAME A LOS ANCIANOS DE LA IGLESIA Y QUE ELLOS OREN POR ÉL, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor; y LA ORACIÓN DE FE RESTAURARÁ AL ENFERMO, Y EL SEÑOR LO LEVANTARÁ, y si ha cometido pecados le serán perdonados. Por tanto, CONFESAOS VUESTROS PECADOS UNOS A OTROS, Y ORAD UNOS POR OTROS PARA QUE SEÁIS SANADOS. LA ORACIÓN EFICAZ DEL JUSTO PUEDE LOGRAR MUCHO. Elías era un hombre de pasiones semejantes a las nuestras, y ORÓ FERVIENTEMENTE para que no lloviera, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y OTRA VEZ ORÓ, y el cielo dio lluvia y la tierra produjo su fruto.”

Lecciones de este pasaje:

1) El sufrimiento y la enfermedad deben llevar al cristiano a orar con perseverancia.

2) No hay porqué ocultar a los hermanos ni el sufrimiento, ni la enfermedad ni las alegrías que pasamos. Para esos somos hermanos en Cristo.

3) Hay que hacerles saber a los ancianos de la iglesia las situaciones que atravesamos. 

4) La alegría debe llevar siempre a los cantos de alabanza al Señor.

5) La intercesión de unos por otros en la oración es necesaria, así como la confesión de pecados (si es que los hubieren). En la iglesia debe haber comunión espiritual.

6) La oración de fe restaura, pero el Señor es el que levanta y aun perdona los pecados cometidos.

7) El profeta Elías es un ejemplo de oración para los cristianos, no sólo por su fervor sino porque él tenía las mismas pasiones que nosotros.

8) La oración del justo puede lograr mucho. La razón es sencilla: el clamor de los cristianos mueve el corazón de Dios. Por eso debemos insistir en la oración.

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